viernes, 30 de enero de 2009

Re-sentimiento

Alineación a la derecha

Así la sorpresa clandestina

así la lluvia desde dentro riega

así me tapas las goteras de mi pecho

así me vuelvo loco.

Así temblando al rededor de mi propio encierro

así desnudo como prófugo  del adsurdo desvarío

así como bala caliente a quema ropa

así destajo el verbo y lo difumino.

Así no quiero seguir con resquemores

con arañazos que luego no aparecen 

que se vuelven impunes con la boca remendada

que carecen de antecedente alguno

que mata el alma sin remedios de pruebas

así no juego ahora

así boto tierrita y así me voy.

Así suelto este réquiem sin más preámbulo

sin visas claudicadas ni masajes de sesos

proclamo mi entereza de no volver al foso

al infierno ganado con saña

así que ya no juego

así que ya me voy.

Luis Guillén


jueves, 29 de enero de 2009

Deponer las Almas


Deponer las almas ahora 

esta calle se ha hecho demasiada ancha 

esta risa ha sido forzada hasta el limite 

esta habitación se ha llenado de fantasmas 

esta locura se ha vuelto cuerda de la noche a la mañana 

Desnudar las almas ahora mismo 

esta escalera al cielo se le han rotos los peldaños 

la cuesta hacia la sonrisa se fracturo una pierna 

la amargura se apoderó de los rincones 

sobre el tejado hacen maromas los buenos momentos 

es peligroso este encierro de palabras agudas 

de oraciones donde el sujeto en primera persona  

dictamina el predicado de forma hermética e irreversible 

y el significado del verbo se confunde e irrita.

Luis Guillén

martes, 27 de enero de 2009

Reincido en extrañarte.


Este desvelo de sabanas sin cuerpos

este ventilador sin calor que calmar

esta oscuridad que no evita tu luz

esta ausencia tangible que me embarga

esta risa sin gracia que se fuga de mi boca

esta manera tonta de decir la verdad

estos besos empacados sin remitente alguno

este desangre de extrañarte a morir

de echarte de menos al menos algo mas

esa mirada huidiza que se cuela en la mía

tus chistes tan en serio que parecen verdad

volcados en mi mente sin ninguna reserva

extasiado como loco de ti

esta soledad que me marca tu espacio

que grita casi muda al fondo de la casa

que sella en el silencio

que dice que no estas.

Luis Guillén.
Despistado e incoloro
una ráfaga de humo que emerge
carmín color chillón
un labio más prominente
el otro tímido y delgado
aroma que pasa por la calle del medio
olor a orine callejón oscuro
un borracho que vomita la bilis
y el sexo hace de las suyas
escondido tras farol sin bombillas
esta cabeza no me reconoce
un millar de cosas revolotean en ella
cervezas
figuras sudadas
carcajadas y saliva
el aullar de un gato desgarbado
un ¡carajo! sin recato
escupido con ganas
sobre la humanidad de un ser voluptuoso
que presume pureza excedida
una silla rota sobre un cráneo que chorrea
sangra como un demonio
pero ríe cual loco de atar
cuervos negros desplumados con hipo
sudadera sudorosa y sudada
canción ronca sin pudor
mano clandestina que se da a la fuga
bajo falda corta de saten
cigarrillo a medio terminar
Soy un acertijo verdadero
consigo descifrarlo
mientras me encuentro solo
y el sol vuelve a bañar sin clemencia
el techo de aluminio
rebulle de calor
y la cabeza no es redonda
sino un cubo de hielo
tratando de congelar recuerdos
trasnochados allí
en el fondo de ese vaso en el bar.

Luís.